Si estás siendo acosado por una campaña de Change.org y los correos electrónicos no cesan de llegar a tu bandeja de entrada, es momento que enciendas tu protocolo de gestión de crisis (recuerda que el control de daños debe ser generado en las primeras 72 horas en que aparece la crisis).
Si bien animo la actividad de los ciudadanos a través de las redes, muchas de estas campañas son tendenciosas y tienen como objetivo hostigar a quién recibe las firmas.
Estas campañas funcionan de esta manera:
En primer lugar el que genera la petición debe encontrar una buena causa que llame la atención y asegure el éxito. Generalmente los que levantan las firmas recurren al lado más emocional de la situación.
No hay filtro previo. Levantas una campaña en pocos paso. Tienes la posibilidad de hacer actualizaciones constantes e informar a través de mailing a tus firmantes para que animen a otros a firmar digitalmente.
Al comienzo de la campaña, la plataforma les va a pedir un correo electrónico dónde cada firma que se consiga (con mensaje o sin él) llegue a los destinatarios correspondientes o los tomadores de decisión.
Una vez que la ciudadanía empieza a firmar te irán llegando correos electrónicos con las firmas electrónicas. Básicamente la herramienta hace lobby digital.
Change.org te ayuda a desarrollar una petición de forma simple y en pocos pasos, con un mínimo de requisitos, el probela reside es que se queda con tu base de datos (pese a que también la puedes descargar). Los correos recolectados sirven al que inicio la campaña a crear su propia base de datos y con ello realizar campañas de mailing.
Te dejo una breve lista de pasos para defenderte de una campaña en Change.org
1.- La mejor forma de defenderte es tener paciencia. Las campañas de Change.org son fugaces.
2.- Tu correo personal deben de tenerlo solo las personas más cercanas a tu equipo, crea otro correo que aparente ser el personal pero que lo administre tu equipo de comunicación. Las campañas de firmas digitales atacan tu correo personal. Generalmente las campañas que llegan al correo corporativa son más ineficaces.
3.- Configura la bandeja de correo no deseado para bloquear a los remitentes que vengan desde la campaña. Si el correo al que te están llegando es el institucional, pídele a tu equipo de sistemas que bloquee y mande a la carpeta de spam los correos que vengan del dominio change.org
No permitas que usen Change.org para acosarte, intimidarte o amenazarte, si es así están vulnerando la mayoría de políticas que te ofrecen los servicios de email. También puedes ponerte en contacto con las autoridades y consultar si en tu país existe alguna ley de acoso informático que sea aplicable a tu situación.
Si has hecho algo realmente malo y la ciudadanía está expresándose de esa manera, pues te mereces todas las firmas que recibas.